julio 08, 2009

Del conocimiento del JEFE

Me parece bastante instructivo el extracto de cuento que me envió el JEFE y quiero compartirlo con ustedes:

"El más puro de los caballeros que sirvió a Arturo fue Galahad, a pesar de tener en común con el rey el hecho de haber sido concebido fuera del matrimonio. Aunque el hecho de que Galahad fuese hijo natural de Lancelot no conllevaba estigma alguno, cuando llego el día en que debía convertirse en un paladín de una dama de la corte, el rey Arturo se opuso y manifestó su descontento.

“No permitiré que seas el paladín de ninguna dama noble”, declaró Arturo. Galahad se ruborizó y tartamudeó: “Pero mi señor, todo caballero debe servir a una dama para demostrarle la pureza de su amor”.

“¿Qué sabes tú del amor?”, pregunto Arturo de una manera tan incisiva que Galahad se ruborizó todavía más intensamente. “Si estás tan ansioso de luchar por una dama, te presentaré a tres para que escojas”. El rey mando a llamar inmediatamente a Margaret, una vieja lavandera de pelo cano y con verrugas en la nariz. “¿Le servirías a ella por amor, gentil caballero?, le preguntó Arturo.

La confusión de Galahad fue enorme. “No comprendo, mi señor “, murmuró. Arturo lo miro fijamente e hizo salir a la mujer. “Traigan a otra”, ordenó. Esta vez trajeron a una niña recién nacida. “Si Margare te pareció demasiado vieja y fea, entonces, ¿qué piensas de esta dama? Es de noble cuna y no puedes negar su hermosura”. Aunque no había duda de que la niña era muy hermosa, la confusión de Galahad iba en aumento. Sacudió la cabeza.

“Ese amor del que hablas es un amor muy difícil de complacer”, dijo Arturo. Mando llamar a una tercera dama y esta vez entro Arabela, una preciosa niña de doce años. Galahad la miró y trató de reprimir la ira. “Mi señor, es apenas una jovencita y mi media hermana”, dijo.

“Pediste una dama a la cual servir “, dijo Arturo, “y he sido lo bastante generoso como para presentarte a tres. Ahora debes decidir”.

Galahad estaba aturdido. “¿Por qué te burlas de mí de ese modo?”, preguntó.

Arturo hizo un gesto con la mano, y en pocos minutos salió todo el mundo del gran salón y ellos dos quedaron solos. “No me burlo de ti”, le dijo. “Trato de mostrarte algo que aprendí de mi maestro Merlín”.

Galahad alzó los ojos y vió que el ceño de Arturo se había suavizado. “Mis caballeros dicen servir a sus damas por amor”, prosiguió el rey, “y a pesar de sus votos de amar castamente, la mayoría de las veces sienten pasión por aquellas a quienes sirven, ¿no es verdad? Galahad asintió.

“Y cuanto más grande es su pasión por las damas, mayor es su celo en servirles, ¿verdad?, preguntó Arturo. El joven caballero asintió de nuevo. “Merlín me enseño otra forma de amar”, dijo Arturo. Piensa en la anciana, en la niña recién nacida y en la jovencita que es tu hermana. Todas ellas son manifestaciones de lo femenino, y en la medida en que esas formas cambian, lo que llamas amor cambia con ellas. Cuando dices que estás enamorado, lo que realmente estás diciendo es que has satisfecho una imagen que llevas dentro.

“Así es como comienza el apego, con la inclinación por una imagen. Podrías afirmar que amas a una mujer, pero si ella llegará a traicionarte con otro hombre, tu amor se trocaría en odio. ¿Por qué? Porque tu imagen interior ha sido mancillada y, puesto que esa era la imagen que amabas, el hecho de que haya sido traicionada te provoca ira”.

“¿Qué puedo hacer al respecto?”, pregunto Galahad.

“Mira más allá de tus emociones, las cuales cambian constantemente, y pregúntate qué hay detrás de la imagen. Las imágenes son fantasías que existen para protegernos de algo que no deseamos enfrentar. En este caso se trata del vacío. A falta de amor por ti mismo, creas una imagen para tapar el vacio. De allí el intenso dolor que causa un rechazo o una traición en el amor, porque deja expuesta la herida abierta de tu propia necesidad.”

“El amor es considerado como algo muy hermoso y elevado”, se lamentó Galahad, “no obstante, tú lo haces sonar como algo horrible.”

Arturo sonrió. “Lo que suele considerarse amor puede tener consecuencias horribles, pero ese no es el final de la historia. El amor tiene un secreto. Merlín me lo conto hace muchos años, como yo te lo confío ahora: Cuando puedas amar a una anciana, a una niña y a una jovencita de a misma manera, serás libre para amar más allá de la forma. Entonces se desatará dentro de ti la esencia del amor, que es una fuerza universal. Y dejaras de sentir apego –el llamado silencioso al cual obedece el amor.”

El Sendero del Mago, Deepak Chopra

La imagen de la entrada es un cuadro de la anunciación realizado por Bernardo Daddi por el año de 1335 bastante antes de la versión de Leonardo da Vinci, al comparar los cuadros se ve la influencia de este cuadro y de hecho el cuadro de da Vinci tiene un punto de vista similar, el cuadro se localiza en el salón cuadrado de la Sala Denon del primer piso del Museo de Louvre.

2 comentarios:

Raven Lausleahleahhann dijo...

WOOOOORALES!!! Nada más que la puritita verdá!

Gracias por compartir el relato, es en verdad muy instructivo.

Un beso

Chendo dijo...

El Jefe es un ser que estimo mucho y que me ha dejado mucho en poco tiempo y pienso que el compartir algo de lo que me deja es lo menos que puedo hacer, un beso ;)